01 Oct IV Festival Internacional de Blues de Moratalaz
Néstor Pardo abrió la cuarta edición del Festival Internacional de Blues de Moratalaz. Desde las calles de New Orleans hasta los campos de Mississippi, donde aprendió de grandes como Watermelon Slim, cada canción que interpretó fue un tributo a la rica tradición del Blues.
A continuación hubo que realizar cambios de última hora ya que la cantante Dorrey Lin Lyles no pudo acudir a nuestra cita, se quedó varada en Chicago. A veces las cosas no salen según lo previsto. En su lugar Deborah Woodson, sin tiempo para ensayar y con un frio que helaba el alma, nos emocionó con una versión de «I’d Rather Go Blind» de Etta James. Acompañada por César Crespo a la guitarra, magnífico, Marcos Coll a la armónica, Julian Vaughn en la batería y Javier Vacas al bajo, hicieron las delicias del público.
Josh Hoyer & Soul Colossal llegados desde Nebraska, descargaron toda su fuerza y pasión con su R&B y mucho Soul calentando el ambiente. «Si James Brown y Otis Redding tuvieran un hijo, sería Josh Hoyer.» Anoche entregaron un sonido tan grande, tan funk, tan enérgico que nos hizo movernos con su groove. El cierre de la primera jornada de nuestro Festival Internacional de Blues fue apabullante!
Charlie Wood, llegado desde el Reino Unido donde reside, dio comienzo a la segunda jornada de la cuarta edición del Festival y nos trajo lo mejor del sonido Hammond. A finales de los 80 giró con Albert King y de aquellos años «Musicalmente aprendí mucho sobre la tensión y la relajación, sobre cómo marcar el ritmo de un solo, una canción o un set para que la energía aumente. Aprendí mucho sobre la mecánica del blues eléctrico, qué debería hacer el bajo, cómo funciona con la batería, dónde encajan los demás instrumentos y partes, etcétera. Es como un rompecabezas: las piezas deben encajar bien o no se mantendrán unidas. También aprendí a sobrevivir en la carretera en condiciones difíciles, lo cual es una lección valiosa”. Su actuación con un estilo «ecléctico», a caballo del Blues, el Jazz, la música tradicional estadounidense y el R&B atrapó al público asistente.
China Moses es hija de la legendaria Dee Dee Bridgewater y una de las vocalistas más importantes del R&B actual. Se ha venido haciendo un hueco por mérito propio en la escena del jazz vocal. Tiene el mismo desparpajo y la misma alegría sobre la escena que su madre, cualidades artísticas que efectivamente le son heredadas, pero también mucha personalidad propia para dotar a su canción de la suficiente personalidad para reivindicar su propio discurso. Como ella misma dice, esta en su adn. Además ha ido más allá incorporando músicas más propias de este siglo, desde el hip hop, trap jazz o rap, creando un estilo propio muy singular. Muchos de los músicos que asistieron al Festival quedaron cautivados por esta mujer.